Irónico que lo único seguro en
esta vida sea la muerte pero ¿Cuándo será fecha que marque el final de nuestro
ciclo por esta tierra? —Nadie lo sabe— Yo solo quise que por ningún motivo fuese ayer:
Transcurría un día como cualquier
otro en la tranquilidad de vivir en un pueblo que parece la boca del infierno
por el calor extenuante, donde prácticamente no hay nada que hacer y donde
jugar Domino de a preso es una de las mejores formas de invertir el tiempo. Así
son mis vacaciones.
Todo iba muy bien hasta que por algún absurdo motivo (conclusión a la que llegue horas después) empecé a discutir con
mi hermano, a tal grado de ponerse reacio a irme a dejar a la terminal. Estaba
cegada por la irracionalidad que deje en la mesa sin probar, el plato de comida que me había
servido mi mamá; salí de casa tan molesta que ni siquiera me despedí de mi papá
e hice caso omiso cuando mi hermano menor salió a alcanzarme.
Feo, triste y perturbador es
darse cuenta tiempo después que cosas insignificantes se magnifican a tal grado
que suelen provocar problemas que pudieron evitarse. El escenario natural de mi último día
en casa hubiera sido otro totalmente opuesto si no fuera porque a veces y más
frecuentemente de lo que quisiera admitir, tomo decisiones viscerales poniendo
en entre dicho hasta mi propia capacidad de razonamiento.
Llorar todo el trayecto de mi
viaje no sosegó la frustración y arrepentimiento de mis acciones, al contrario,
el tan solo imaginar que por alguna razón ese hubiera sido mi último día sobre la
faz de la tierra… De tan solo pensarlo se me eriza la piel.
No me da miedo el hecho de ser un
ente mortal con fecha de vencimiento, lo que si me asusta, es que sea el día
que sea, haya hecho algo que no me dé el tiempo de remediar o disculparme.
Por eso y ahora que estamos en temporada de fijarnos propósitos, el mío será tratar de ser una mejor persona en
todos los aspectos, no darle tanta importancia a cosas superficiales e intrascendentes.
Cuidar y demostrarles una y mil veces a quienes quiero, lo importante que son
para mí.
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